jueves, 16 de junio de 2011

Vacaciones Permanentes

Después de un tiempo que no fue para nada sabático y adeudando la 2da parte de mis, a esta altura architardias crónicas en Chile, volví. En fin, lo prometido es deuda.

En los días sucesivos estaré subiendo música y contribuyendo nuevamente con la regularidad acostumbrada. Hasta entonces




02/04


Esa noche iba a concentrar. Una cena liviana. Dormir temprano. Un desayuno suculento por la mañana. Pero no. No pude vencer la tentación y me sumergí en los vapores de la noche. Dormí tres horas. Desayune mal y apurado. Y cargando una enorme resaca me dirigí al metro de Santiago, estación Santa Lucia con destino a O'Higgins. El sol pegaba fuerte en mi cabeza saturada mientras buscaba mi entrada en una carpa habilitada para la ocasión. Tuve que rodear el enorme predio para hacerme con ellas. El asunto se resolvió de forma rápida y prolija. Finalmente ingrese al predio arrastrando los pies y preguntándome si sería capaz de aguantar hasta el final de la jornada, unas 12 horas después. Instalaciones supercómodas, excelente organización y un público dispuesto a pasarlo bien y disfrutar fueron una constante durante las dos jornadas. Al principio, me inquieto la gran cantidad de carabineros desplegados dentro del predio. Sin embargo, las fuerzas del orden no reprimieron las manifestaciones y comportamientos típicos de cualquier concierto de rock y todo se lleno de humo y de otras sustancias que forman parte de la lista 1 de narcóticos prohibidos. Let's rock!
Francisca Valenzuela, fue la encargada de inaugurar el primer día del Lollapalooza. Luego salieron los Bunkers a escena, otro de los créditos locales. Estuve un rato escuchando y otro haciendo una recorrida por las instalaciones. Dos escenarios principales al aire libre, el increíble estadio techado Arena Santiago y el hermoso teatro La Cúpula. Steel Pulse, la gran banda inglesa de reggae roots dio un show impresionante que hizo bailar a todos los presentes. De volver a nacer, me gustaría ser David Hinds, el diminuto vocalista de los Pulse, el tipo más canchero y divertido del mundo.


Los Cypress Hills son los Rolling Stones del Hip Hop. Posiblemente, Beastie Boys sean los Beatles. Sea como fuere, el asunto es que dieron un show increíble que tuvo su punto más alto cuando Dj Muggs y el percusionista Eric Bobo quedaron solos en el escenario y le volaron la peluca a más de uno.
El magnífico Arena Santiago, era el lugar para los más clubbers y fui a ver qué estaba pasando. Llegue en el momento indicado ya que sobre el escenario estaba Chris Cox junto al fundador de Lollapalooza, sexopata, empresario, vocalista de Jane's Addiction y DJ, Perry Farrell.


Joachim Garraud, fue otro de los buenos Dj's que se presentaron. El francés brindó un set bien bailable, en el cual abundaron las referencias a Daft Punk, Justice y toda esa camada de buenos artistas pertenecientes al french touch. También hubo unos cuantos guiños rockeros, de manera que todos se sintieron a gusto durante su presentación, la cual fue despedida con una gran ovación.
Mientras tanto, afuera se presentaban James, la buena banda australiana The National y Ben Harper. Además de los colombianos Bomba Stereo. El atardecer caía sobre Santiago y mientras las bandas se sucedían me fui a recorrer los stands dedicados a la permacultura, al reciclaje y al activismo ecológico. Todas cuestiones bien interesantes que podrían aportar muchísimas soluciones a los problemas actuales en materia energética y medioambientales.
Deftones salto al escenario para descargar toda su potencia y energía adolescente. A pesar de que no son una banda que me interese particularmente, debo reconocer que hicieron saltar al público. Muchos, muchísimos jóvenes chilenos, asistieron a Lollapalooza para verlos a ellos solamente.
Estuve un rato escuchando pero sobre todo viendo, a Empire of the Sun, pop electrónico con mucha androgenia y una estética circo-glam con toques místicos. Visualmente atractivos y no mucho más.
El espíritu de la música, la energía intrapersonal y algún que otro factor más de índole farmacológico, habían logrado hacerme olvidar de mi malestar inicial. Aun estaba de pie. Dos artistas para ver y fin del primer día. Tenía un dilema que resolver. The Killers o Fatboy Slim. Sabía que Fatboy era garantía de fiesta, que no podía fallar. Pero elegí mal y presencie el show de unos Asesinos, que parecían algo desganados. Luego, conversando con algunas personas que optaron por el DJ, confirmaron mi sospecha.

Fin del primer día. Recibí otra invitación vampírica, dude algunos instantes pero luego la sensatez se apodero de mí y una vez que puse un pie en mi habitación caí desmayado. Eran las 1230 de la noche y tenía una buena cantidad de horas por delante para reponer energías.

03/04

Con un mejor estado físico y habiendo dormido lo suficiente, ingrese al predio en el mismo momento que la Mala Rodríguez subía al escenario principal. Pero fueron los Todos tus Muertos, los primeros en calentar el escenario y al público. Chico Trujillo, vino después e hizo bailar a todos con sus ritmos cumbieros, en especial a la gran cantidad de visitantes norteamericanos y europeos.
Sin lugar a dudas, una de las bandas más esperadas eran los Flaming Lips. Y no defraudaron. Wayne Coyne, dentro de sus burbuja, sí. Osos de peluche, disfraces, diversión y locura. Los de Oklahoma desplegaron toda su parafernalia para un carnaval lisérgico impresionante al que solo le falto una cosa. Hubiera sido mucho más impresionante de noche y no cerca de las 16 horas. En fin, el asunto siguió adelante y muchos decidimos descansar tirados en el pasto mientras sonaba Sublime with Rome. Conversábamos, reíamos y hacíamos un balance de todo lo que habíamos visto.

Anduve dando vueltas por los otros escenarios, y todos bailamos bastante con Boys Noize, un buen DJ alemán. Quedaba Jane's Addiction, los cuales con su tipas porno nazi look bailando en escena y riffs legendarios llevaron nuestra mente hacia los primeros 90's y de ahí a la felicidad.
Kanie West fue el número de cierre, pero yo ya me consideraba realizado. Así que presencie la primera parte del show y luego me acerqué hasta la imponente cúpula del LG Stage para escuchar la ultima parte del set de Aarmin Van Buuren.

El show debe terminar. Pero la buena noticia es que Lollapalooza Chile tendrá una secuela en 2012. Así es que haciendo un balance general solo puedo calificar estas dos jornadas en parque Santiago como impresionantes y decir: ¡Nos vemos en 2012!

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Welcome back Mars. Desde ya va un rockea, aunque hayas lindado el arjonesco al haber elegido a los killers. Muy buena la cronica.

Damian Mars dijo...

Gracias.
Me llamo la atención que cuando subieron los Killers, una buena parte del público cantara: Ole , Ole , Ole Richard, Richard! Ahí me di cuenta que este blog trasciende fronteras.

Un curioso encontró dijo...

Varias cosas:

1. The Killers? En serio?
2. Al fin.
3. 2012 todos en combi.
4. En serio The Killers?

Damian Mars dijo...

1-Sí
2-Sí
3-Sí
4-Uf

Anónimo dijo...

te va a perseguir toda la vida...

Ale Juli dijo...

algún día wikileaks se va a encargar de que se sepa el asunto de the killers, va un rockea casi añejado